No son despedidos por las autoridades cuando embarcan, ni se izan banderas con honores a su regreso.
El Ministro no les impone medallas ni galones, ni el Rey les felicita las navidades por videoconferencia…. Nada de eso buscan, nada de eso necesitan.
Solo hacen su trabajo: PROTEGER nuestros barcos y sus tripulaciones para evitar secuestros como el del pesquero Alakrana. Y tan bien lo hacen, que han sido capaces de repeler y evitar TODOS los intentos de abordaje llevados a cabo por los piratas somalíes a navíos españoles en el Índico: ¡TODOS!
Muy lejos de casa, en las aguas más peligrosas del mundo, vigilantes de seguridad seguramente (y como siempre) sin los medios ni la formación adecuados pero con mucha profesionalidad y vocación, se juegan la vida para devolver a nuestros pescadores a España sanos y salvos.
AQUÍ VA NUESTRO PEQUEÑO HOMENAJE A ELLOS
*[enlace de un reportaje especial de la ETB vasca sobre nuestros compañeros en alta mar]: